Vanna Ashur, nuevo PJ |
Al poco de su eliminación en el torneo, Jeremiah recibió la visita de lord Garth Herston. Muy diplomático, el señor le ofreció consuelo por su derrota y expresó lo injusta que le parecía, para acto seguido pasar al verdadero motivo de su visita, que no era sino ofrecer al Seabreeze la mano de su hija en matrimonio. Por desgracia, Brenda Herston no se encontraba en Bastión de Tormentas para el torneo, así que tendrían que presentarse más adelante. Tras las respectivas cortesías, Ancel habló con su hermano sobre la tal Brenda: se trataba de una mujer que había dejado la juventud atrás, viuda de su primer marido, un Brax creía recordar. Y por otro lado, recordaba que no era en absoluto agraciada, cosa que pareció decepcionar todavía más a Jeremiah.
Los pavoneos de Jeremiah parecían haber tenido éxito entre las muchachas de Bastión, pues la mañana siguiente tuvo un encuentro -aparentemente fortuito- con una joven tan bella que le dejó sin aliento. Decía llamarse Maryn, hija de lord Eddan Hasty, y se mostró extremadamente amable y compungida por la eliminación del joven Seabreeze. Quizá Maryn no tenía la belleza arrebatadora de Lidda o de su propia hermana Megara, pero su pelo rubio, sus pecas en las mejillas, sus ojos y su sonrisa no tardaron en embriagarlo. Cuando la muchacha se despidió, caminando con sus dos damas de compañía, apartó su mirada de ella, entrando en el juego de seducción, pero ya no se la podría sacar de la cabeza en todo el día. Más tarde, hablando con Ancel, éste le informó de lo que sabía: la tal Maryn no podía ser otra que Maryn Tormenta, la hija bastarda de lord Eddan. Aunque vivía en el castillo como una hija más del noble, Ancel le aconsejó que no debería ser su primera opción de a la hora de contraer matrimonio.
En la eliminatoria del mediodía, Breon fue descabalgado en la segunda lanza por ser Arys Oakheart. Los Seabreeze se quedaban sin representación en la competición más importante. Deberían emplearse a fondo en el cuerpo a cuerpo, era su única oportunidad de ganar dinero y notoriedad.
A lo largo de todo ese día, Ancel mantuvo largas conversaciones con los Lugus [tirada 27 cautivar], y estableció un principio de amistad con Orten, que no con Naton, cuya única preocupación parecía ser entrenar y mejorar sus habilidades marciales. También visitó a lord Estermont y recibió un par de veces la visita de lady Orlanna con su hija Aranette; aunque la paciencia de la mujer estaba al límite, la sutil labia e inmejorables maneras de Ancel consiguieron apaciguarla. También se celebró la primera sesión clasificatoria para la final del Gran Combate Cuerpo a Cuerpo, que los Seabreeze superaron sin dificultades ante una casa menor de las Tierras de los Ríos. Pero el hecho más destacado no fue la clasificación de los Seabreeze, sino la muerte de Langley Woods, un miembro del séquito de los Lugus (prometido de Marita Lugus), que fue herido durante la competición, aparentemente sin importancia; sin embargo, durante la noche sufrió una agonía parecida a la que había padecido Adham Dannett. Por Bastión de Tormentas comenzaron a surgir rumores de venenos, conspiraciones y asesinatos.
El día siguiente amaneció con una peculiar noticia, aparte del deceso de Woods: los Hermanos de la Guardia de la Noche habían sido atacados por desconocidos, y habían tenido que ser defendidos por la guardia de Bastión. A requerimiento de Jeremiah, los Seabreeze hicieron una "visita de cortesía" a lord Eddan Hasty. Por desgracia, lord Eddan se encontraba ausente, pero Jeremiah aprovechó para llevar a cabo su verdadero propósito allí, que era entablar unos momentos de conversación con Maryn. La muchacha —que se encontraba en compañía de Emma Hasty, la sobrina de lord Eddan— incluso le dio en secreto una prenda para que la llevara durante el cuerpo a cuerpo. Mientras Jeremiah se encontraba con Maryn, Ancel conversó con ser Bonifer Hasty, apodado "el Bueno" por su gran devoción a los Siete. El caballero les comentó que quizá recibieran en breve la visita de lord Eddan, pues hacía algún tiempo que había enviudado y Megara había causado una impresión muy grata en él. Los pretendientes de la joven Seabreeze se habían multiplicado desde su presentación en la fiesta, y día sí día también recibía flores y notas de sus admiradores. Agradeciendo a ser Bonifer su atención, se retiraron; Ancel se mostró de acuerdo en que la belleza y candidez de la muchacha Maryn eran arrebatadoras, pero expresó sus reservas acerca de la conveniencia de acordar un compromiso con una muchacha bastarda. Quizá pudieran llegar a un acuerdo de esponsales con la joven Emma, que aunque menos agraciada que Maryn era hija legítima y por tanto una opción más válida. Jeremiah apenas escuchaba, embriagado todavía por el perfume de Maryn.
La noche del séptimo día de torneo, un sirviente despertó a Ancel y al resto de Seabreeze de su descanso. Alguien había llegado a la posada preguntando por Ancel y lady Madelyne. Al bajar, se encontraron con una mujer que había dejado en un rincón su capa empapada y tenía un cuenco de caldo entre sus manos. Los Seabreeze se sorprendieron al reconocer a Vanna Ashur, la dama de compañía de lady Madelyne que se había quedado en Quiebramar. La esposa de su capitán de la guardia, agotada, traía noticias urgentes. Les contó que hacía aproximadamente una semana su marido la había convocado precipitadamente a sus aposentos. Allí, Loren le contó en un susurro que lord Jeron había decidido desheredar a Ancel, y que él se había opuesto a tal decisión. El señor de los Seabreeze se había tomado muy a mal tal desencuentro con el que consideraba su camarada de mayor confianza en Quiebramar, y ahora temía algún tipo de represalia. Además, los cuervos que se habían enviado desde el otro extremo de la isla eran correspondencia entre lord Jeron y los Wylde. Alguien con los conocimientos de un maestre había debido de estar ayudando a lord Jeron. No había acabado Loren la última frase cuando algunos de los miembros de la guardia de halcones entraron violentamente y amenazaron a la pareja con sus armas. Arrestaron a Loren y a ella la dirigieron hacia los calabozos; por pura suerte pudo escapar burlando a sus captores, y con la ayuda de Jana Alyr consiguió pasaje en un mercante que la llevó hasta Cienrocas. Durante el viaje, Vanna se maldijo mil veces por no haber visto venir aquello; había recibido algún informe del comportamiento extraño de lord Jeron y sus compañías, sí, pero no los había juzgado lo suficientemente importantes.
Las noticias fueron como un jarro de agua fría para el grupo. Si realmente Jeron había decidido desheredar a Ancel ahora era Jeremiah el heredero legítimo. Todas las miradas se dirigieron hacia él; cuando dejó claro que apoyaría a su hermano en todo, pasaron a discutir cuál sería su plan de acción. Era evidente era que necesitaban más información de la situacion, así que esperarían a la finalización del torneo, ya cercana, para realizar su próximo movimiento. Ahora, todo lo que podían hacer era descansar lo máximo posible.
El día siguiente se produjo la llegada de los guardias Tudbury que escoltaban al muchacho que en teoría había sido testigo de los ataques a las aldeas Dannett. Ser Meryn Tudbury mandó llamar a los Seabreeze tan pronto como llegaron. Los hombres ya se encontraban en el campo de justas dispuestos a afrontar la final del Gran Combate, así que fueron lady Madelyne y Vanna las que acudieron al encuentro con los Tudbury. Cuando llegaron, vieron que uno de los guardias se encontraba postrado en un camastro y dos más lucían heridas varias; habían sido atacados de camino, por bandidos salidos de la espesura. Por su parte, el muchacho estaba tan traumatizado que no hablaba más que con palabras sueltas, aterrorizado por cualquier movimiento brusco a su alrededor. Vanna y lady Madelyne pidieron que las dejaran a solas con él, para intentar calmarlo.
Mientras tanto, en el campo de justas, los heraldos y músicos convocaban a la multitud a presenciar el Gran Combate Cuerpo a Cuerpo. Las ocho casas clasificadas para el evento se dispusieron en círculo según el número que les había tocado en sorteo. Así, a la derecha de los Seabreeze se encontraban los Buckler con ser Brus a la cabeza, y a la izquierda los representantes reales con Sandor Clegane, Thoros de Myr y algunos Lannister. Más allá de los Buckler se encontraban los Swann, con ser Donnel y ser Dorian espléndidos en sus armaduras blancas y negras. A la derecha de los Swann, los Estermont, con ser Aemon y su hijo ser Alyn. A la izquierda del Perro y sus compañeros se encontraban los representantes de los Tyrell, y más allá los Dayne dornienses, en cuyas filas peleaba ser Gerold Dayne, Estrellaoscura, lo cual era un acontecimiento pues no se prodigaba en torneos. Cerrando el círculo, opuestos a los Seabreeze, se encontraba el grupo variopinto de caballeros dornienses capitaneado por ser Gennady Shanin en compañía de Bryan Telson. Lord Renly dedicó una alentadora arenga a los participantes, y explicó las normas del combate, insistiendo mucho en que se trataba de un duelo a primera sangre y no toleraría inquinas ni juego sucio. Cuando acabó de hablar, los cuernos sonaron, dando inicio al combate. Imprevisiblemente, el rey Robert arrojó el pichel del que estaba bebiendo su cerveza, y con la sangre inflamada por los cuernos de guerra cogió su martillo y se arrojó a la arena, gritando estentóreamente. Apartó a uno de los Lannister y se incorporó al grupo de Sandor Clegane y Thoros de Myr, cargando inmediatamente contra los Seabreeze, concretamente hacia Jeremiah. Un combate a primera sangre no era ni mucho menos como un combate a muerte, y eso posibilitó la progresión de los Seabreeze en la competición. Jeremiah dejó fuera de juego al propio rey y al Perro, lo que le valió rugidos de admiración por parte del público. El resto de casas se dividió, luchando a diestro y siniestro con los que estaban a su lado. El combate fue tremendo, con numerosos envites y lances espectaculares, para regocijo de los presentes. En un momento dado, Gennady Shanin quedó al alcance de ser Breon, que no dudó en atacarlo para ayudar a Telson a recuperar su herencia. Sin embargo, sus golpes fueron suficientes para eliminar a Shanin pero no para dejarlo fuera de combate, así que mientras éste se retiraba, Telson se emparejó con Breon y ambos llevaron el combate hacia ser Gennady, fingiendo a continuación un accidente. Shannin quedó inconsciente y Telson quedó eliminado por Breon; acto seguido, el joven cogió la espada del caído y se marchó del combate. Ancel, por su parte, llegó al cara a cara con Estrellaoscura y con un golpe de suerte increíble dejó fuera de la lucha al dorniense, que tras mostrar una gran sorpresa inicial, mostró una sonrisa de felicitación. El Seabreeze no se lo creía, le parecía imposible haber vencido a un guerrero famoso en todo Poniente. Pero había que seguir.
Al cabo de una hora y media sólo quedaban en pie cinco contendientes agotados: Donnel y Dorian Swann, uno de los compañeros dornienses de ser Gennady, Breon y Ancel. Ancel fue abatido por el dorniense, mientras Breon resistía ante los Swann. Cuando el dorniense se acercó hacia el combate, ser Donnel salió a su encuentro. Breon se encargó de ser Dorian mientras el dorniense caía bajo los golpes certeros de ser Donnel. Entre jadeos y arrastrar de pies, finalmente se encontraron Breon y el último de los Swann. La gente no podía creer estar contemplando un combate tan apasionante, y gritaron, enfervorizados. "¡Mataleones!" gritaban unos. "¡Ser Donnel!¡Swann!" gritaban otros. Los dos caballeros se tantearon, recuperando el aliento. Finalmente, ser Donnel lanzó su espada como un relámpago plateado hacia el pecho de ser Breon. Pero éste, girando sobre sí mismo, evitó la estocada y descargó un golpe con todas las fuerzas que le quedaban sobre el hombro del Swann, que cayó al barro sin aliento. Las gradas se vinieron abajo entre gritos de "¡Mataleones!" y "¡Seabreeze!". Cuando todo se calmó, lord Renly proclamó sin tardanza a la casa Seabreeze como campeona. Breon apenas podía levantar los brazos cuando se reunió con sus compañeros, alborozados por la victoria. El campo de justas se inundó con la voz de la multitud, enardecida por el magnífico espectáculo ofrecido.